----- Del Inmaculado Corazón De Maria - DIÓCESIS DE PHOENIX -----
1. Evangelizar
Evangelizar, de modo especial a las familias, a través de la espiritualidad de la Llama de Amor del Inmaculado Corazón de María.
2. propagar
propagar su mensaje para que el Amor del Padre Eterno y del Sagrado Corazón de Jesús llegue a todos los corazones a través de la “Llama” de su Amor.
3. REPARAR
Ofrecer oraciones reparadoras a los tres Sagrados Corazones de Jesús, María y José todos los jueves y primeros sábados de mes.
4. FUNDAR CENáCULOS DE ORACIóN Y SANTUARIOS FAMILIARES
Fundar Cenáculos de Oración en las comunidades parroquiales y Santuarios familiares en los hogares, donde se ore y medite el Santo Rosario, los Evangelios y el Diario Espiritual de la Llama de Amor del Inmaculado Corazón de María
5. PROMOVER EL USO DE LA JACULATORIA PROPIA
Poner en práctica entre sus miembros la devoción privada que la Virgen nos pide en la segunda parte del Ave María donde así sea aprobado: “derrama el efecto de gracia de tu Llama de Amor sobre toda la humanidad…”
6. ORAR POR TODA LA IGLESIA
Orar por la unidad de las familias, por el Santo Padre, las vocaciones sacerdotales y religiosas, la santificación del Clero, la defensa de la vida, la conversión de los pecadores, y por todas las intenciones y necesidades de la Iglesia a nivel parroquial, diocesano y universal.
7. SANTIFICAR Y SALVAR ALMAS
Promover la santificación de sus miembros y su compromiso apostólico en bien de la Iglesia, siempre bajo la autoridad de sus pastores (director espiritual, párrocos y obispos).
8. Participación
Pueden participar y formar ser parte del Movimiento Llama de Amor todas las personas que deseen vivir libre y voluntariamente su vocación cristiana católica de acuerdo con la espiritualidad, misión y estatutos propios de esta Asociación privada de fieles.
9. Difusión
Difundir y proteger el Carisma de la Llama de Amor mediante el estudio del Diario espiritual y el Catecismo de la Iglesia, la oración y el testimonio de una vida santa y de servicio a la Iglesia bajo la autoridad de sus pastores.